Que me gusta Dragon Ball no es secreto para nadie. No
entraré en detalles, sólo quiero explicar brevemente dos cosas; la primera, la
muerte del saiyajin: cada que un saiyajin está a punto de morir, se hace más
fuerte si logra sobrevivir; la segunda, la conversión a Super Saiyajin: cuando
Gokú se convierte por primera vez en Super Saiyajin, dice una palabras que bien
pudieron haber salido de un libro budista, “Tengo un corazón tranquilo, pero ahora soy el
guerrero legendario que ha despertado por la ira. Yo soy el Super Saiyajin.”
Pues bien, tampoco es secreto para nadie que este año 2014 fue muy difícil para mí,
profesional y personalmente. No logré muchas metas y otras, incluso,
simplemente se esfumaron; pero una cosa es cierta, las veces que me caí, volví
a levantarme; luego me tiraron, y me volví a levantar. Esa primera vez que me
caí y que sentí que el mundo se terminaba (que fue cuando me corrieron de mi
trabajo), fue la más difícil; fue cuando más me juzgué, me autoflagelé y me
victimicé, pero a fuerza de voluntad seguí adelante. Las otras, no diré que las tuve bajo control,
pero por amor y por respeto a mí misma, sabía qué hacer y qué no, y supe
levantarme. El último golpe fuerte que recibí y que me tiró (que fue cuando mi
novio -ahora ex- me cortó), estaba totalmente preparada para
levantarme, ya era muy fuerte, justo como un saiyajin que ha estado a punto de
morir muchas veces pero ha sobrevivido cada una. Por eso al saiyajin o se le mata definitivamente, o
se volverá más fuerte que el enemigo. Yo hoy no dudo que vuelva a caerme, pero
ahora sé que soy lo bastante fuerte e inteligente para levantarme.
Habrá una
primera vez que te caigas y que sientas que nada tiene remedio y que nada vale ya la pena,
también sentirás que no puedes mantener la actitud, que tu energía se agota y
que es más fácil darse por vencido, pero la práctica hace al maestro: no te
quedes tirado, levántate y después, mantenerte de pie será muy sencillo.
Todo este año mi filosofía fue You only live once! Yolo!
significa no estar atados al pasado ni agustiarnos por el futuro, sino mantenernos
en el día y en el momento presente. Requiere práctica también, hay recuerdos
que acechan y atormentan, y hay metas a las que sentimos que no llegamos y
angustian; pero vive zen, hoy, aquí y ahora, disfrutando cada momento presente
y dando tu máximo con un corazón tranquilo (como Gokú), y eso que quieres, en
su momento, llegará; pero también sé fuerte como un guerrero (como Super Saiyajin) para que las veces que te caigas, te levantes.
Gracias por haberme leído, por haberme seguido y por estar
conmigo este año. En 2015 seguiré trabajando más y mejor, porque este blog es
para todos ustedes. Y no olvidemos que todo lo que nos pasa es lo mejor que podría pasarnos.
Los quiere,
Maggie.
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