Los sérums han sido una verdadera revolución en el mundo de la cosmética. Son sueros con muy alta concentración de distintos activos que penetran hasta las capas más profundas de la piel. Es por ello que utilizando muy poco producto, apenas unas gotas, humectan intensamente la piel del cutis, lo que se traduce en regeneración, alisamiento y profunda hidratación. Son perfectos para esta temporada fría, pero la realidad es que puedes usarlos todo el año. ¿A partir de qué edad debes usar un sérum? Los 25 son ideales.
Los sueros tienen muchas funciones: regeneran, reparan, hidratan y contrarrestan las arrugas. Es muy posible que encuentres uno para cada acción, pero también hay marcas que lo ofrecen todo en un mismo producto.
¿Cómo aplicar un sérum? ¡Muy fácil! Sigue tu rutina de limpieza facial normal (lava tu cara, límpiala con un tónico para cerrar los poros y aplica crema hidratante) y, una vez que tengas la piel limpia, aplica el suero con masajes circulares. La maravilla de los sérums es que son muy concentrados, por eso con unas gotas te será más que suficiente y el producto te durará mucho tiempo. Si usas crema contorno de ojos, aplícala después del sérum.
Si eres constante con el uso de los sueros, inmediatamente sentirás tu piel mucho más suave y recuperará su luminosidad. El paso del tiempo es inevitable, pero gracias a los sérums ahora podemos darle una ayudadita (o ayudadota) a la piel de nuestro cutis.
¿Quieres saber qué sérums están buenos? ¡La próxima semana tendrás un Top 5!
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